Os dejo un poema de Antonio Machado, muy hermoso que anoche me aconsejaron, y me hizo reflexionar sobre algunos aspectos de mi vida.
Siempre andamos con prisas, corriendo de un lado a otro, mirando el reloj, anhelando que sucedan cosas, que probablemente nunca ocurrirán, y no nos damos cuenta, que mientras nosotros soñamos despiertos y corremos hacia ninguna parte, nos estamos perdiendo lo mejor; vivir.
Sabe esperar, aguarda que la marea fluya
—así en la costa un barco— sin que al partir te inquiete.
Todo el que aguarda sabe que la victoria es suya;
porque la vida es larga y el arte es un juguete.
Y si la vida es corta
y no llega la mar a tu galera,
aguarda sin partir y siempre espera,
que el arte es largo y, además, no importa.
Antonio Machado.
Es innegable que con estas letras el poeta reconforta e invade al lector en una calma inmensa. La paciencia es una virtud de la que no todos podemos hacer gala. Pero indiscutiblemente no hay nada más admirable en una persona que la paciencia con la que espera para hacer frente a sus circunstancias. Es, como todas las virtudes, una poderosa arma contra la cobardía, de alguna manera, el saber esperar nos hace valientes para enfrenarnos a la realidad. A veces una retirada a tiempo, y el ser pacientes no es de cobardes sino la mejor de las victorias.
Qué difícil es entender que las cosas lleguen a su debido tiempo. No siempre lo que soñamos es lo que nos puede hacer felices y eso se descubre intentando, fracasando, aprendiendo y vuelta a empezar para esperar el momento justo para que las cosas ocurran.
¿Y tú eres paciente?
Tus sueños no están lejos, solo has de saber esperar.
2 comentarios:
Gracias por animarme a esperar
que ciegos estamos... ;)
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